¿Que es el Budismo?

Normalmente consideramos que la religión es creer en Dios, o mejor dicho, en creer en cualquiera de sus manifestaciones divinas; sin embargo, en el Budismo no se habla de Dios alguno. De esta forma la cuestión que se pregunta es si el Budismo se trata de una religión o si se trata sencillamente de una filosofía -una visión particular del mundo, con pautas de comportamiento ético-, o si por el otro lado es más bien una especie de psicoterapia, una manera de comprendernos a nosotros mismos y afrontar los dilemas que la vida nos plantea. En cierto modo el budismo abarca todo esto y al mismo tiempo incluye mucho más. Para entender los fundamentos del Budismo es necesario aproximarse a Buda lo más posible. Una forma de hacerlo consiste en estudiar los primeros textos donde aparecen sus diálogos y ver qué aspectos resultan todavía relevantes para nuestra vida. Esto no quiere decir, que tengamos que rechazar interpretaciones de escuelas posteriores, si no de acercarnos al buda histórico. Hoy en día los budistas occidentales son herederos de toda la tradición budista. Pueden admirar, respetar y hacer uso práctico tanto de los elementos del Budismo Soto Zen japonés como de los del Budismo Vajrayana tibetano o del Theravada tailandés. Sin embargo para poder comprender la tradición en su conjunto hemos de volver siempre a sus raíces, a la experiencia desde donde surgió todo el budismo.

El budismo fue iniciado por el personaje histórico Siddhartha Gautama hace unos 2.500 años. Gautama nació como príncipe en el reino de Kapilavastu, en la región fronteriza entre la actual India y Nepal. Estaba en un entorno muy privilegiado en el que, de haber crecido con normalidad, podría haberse convertido en rey. Sin embargo, en su juventud sintió el “sufrimiento de la vida”, dejó de lado su condición de príncipe heredero y se adentró en solitario en el bosque para convertirse en un asceta religioso. Gautama consideró lo siguiente: en esta sociedad algunas personas son felices y otras infelices. Las personas son diferentes en distintos aspectos, pero todas son igualmente infelices en el sentido de que todas tienen que vivir hacia “la vejez, la enfermedad y la muerte”. La propia vida humana es “sufrimiento”. Este sufrimiento fundamental no puede ser borrado por la propiedad, la condición social ni el estatus. Para quien conoce este hecho, ser príncipe heredero no significa nada. Encontrar una forma de escapar del sufrimiento de vivir y alcanzar un estado de paz es el único camino que uno debe tomar.

Siddhartha Gautama

Aunque hay diferentes opiniones sobre el lugar y fecha del nacimiento de Buda, Siddharta Gautama nació en una familia noble y su destino desde niño era ser príncipe. Su padre, el rey Sudodana, quiso ocultar durante su niñez los padecimientos de la vida. A los 16 años Siddharta se casó con Yasodhāra, su prima, y tuvieron un hijo, Rahula. Se dice que hasta los 29 años vivieron una buena vida rodeados de lujos y abundancia. Fue entonces cuando se produjeron los “cuatro encuentros” y la “gran renuncia”. El primer encuentro se produjo cuando, caminando, vio a un hombre viejo. Entendió que todas las personas envejecen. Esta situación le motivó a hacer otros tres recorridos. Fue entonces cuando se encontró con un hombre enfermo, un cadáver y un asceta. Tras estas cuatro revelaciones, abandonó su palacio, su vida de lujo y comenzó una vida de renuncia y vocación. En un principio, Siddharta Gautama mendigaba por las calles para conseguir el camino hacia la iluminación. Renunció a todo bien material y comenzó a practicar la mortificación física del cuerpo.

"El dolor es inevitable, el sufrimiento es optativo"